Jassim Mohammad
Alemania ha sido testigo de un crecimiento del extremismo islamista en los años recientes. Antes de analizar las causas, resulta muy útil trazar el panorama:
Los Grupos Islamistas Clave en Alemania
De acuerdo con el informe de la Oficina Federal de la Policía Criminal de Alemania (Bundeskriminalamt, BKA) en 2018, los principales grupos yihadistas salafistas son: [1]
- Ansar al-Asir (Defensores de Prisioneros): un grupo ostensible en defensa de los derechos de los prisioneros, es una organización salafista que hace campaña en nombre de prisioneros musulmanes, la mayoría de los cuales son yihadistas y terroristas, retenidos en Alemania y en el extranjero. El grupo es activo entre los mismos detenidos, haciendo proselitismo sobre su versión del islam. El sitio web del grupo provee información sobre los prisioneros y formas en que los lectores pueden apoyar su causa presionando al estado y demás.
- Milli Gurus (Visión Nacional): Fundado por el islamista turco Necmettin Erbakan en los años 60, Milli Gurus es uno de los más grandes movimientos islamistas entre la diáspora turca en Europa, que afirma tener más de 300 mezquitas y 30.000 miembros en Alemania. La doctrina de Erbakan es extrema, virulentamente antioccidental y antisemita, pero él no predicaba la revolución violenta. En lugar de eso, Erbakan instruyó a sus seguidores enfocarse en la dawa, (proselitismo), creando las bases ideológicas para un futuro estado islámico. Este concepto se basó en las ideas del ideólogo de la Hermandad Musulmana Sayyid Qutb y el teórico islamista hindú Abu al-Ala al-Mawdudi, de modo que se continúan distribuyendo los libros de ambos en sitios como el Centro Islámico de Múnich (Islamisches Zentrum München) donde Milli Gurus y otras fuerzas derivadas de la Hermandad son muy poderosas. [2]
- La célula terrorista de Wolfsburgo: El grupo de alrededor de cincuenta personas, centrado en Hamburgo, que fue influenciado por un operativo del Estado Islámico (ISIS) que los atrajo en línea. Dos acusados enfrentan penas de prisión después de que se dispersara lo que quedó de la célula – la mayoría se habían ido a Siria – en Alemania a comienzos del 2015. Hasta el momento, al menos siete del grupo de Wolfsburgo han sido asesinados en Siria.
- Die Wahre Religion (DWR, La Verdadera Religión): Ibrahim Abu Naji, uno de sus más prominentes líderes con base en Colonia, ha sido acusado de incitación al odio y a la violencia. Un buen número de personas en y alrededor del grupo han terminado en las filas de ISIS.
- La red Abu Walaa: liderada por el iraquí de 34 años “Abu Walaa”, cuyo nombre real es Ahmad Abdulaziz Abdullah Abdullah, esta red extremista – con sede en Dortmund y Hildesheim en Alemania occidental – se volvió posiblemente la división clave operacional y de reclutamiento de ISIS en Alemania luego del ascenso del “califato”. [3]
Aumento y Crecimiento de los Yihadistas Salafistas en Alemania
La policía y agencias de inteligencia alemanas consideran a casi 800 islamistas y salafistas alemanes como potenciales terroristas, de acuerdo con el informe de la BKA de 2018. De estos, 450 están actualmente en Alemania y los otros han dejado el país. Mientras tanto, la BKA señala que la propagación de extremistas “no violentos” es un problema que se ha vuelto cada vez mayor.
Alemania se vio afectada por varios ataques terroristas en 2016, que llamaron la atención al floreciente ambiente salafista en el país. Desde el 11 de septiembre de 2001, más ciudadanos alemanes han muerto en ataques terroristas que los que fueron asesinados durante la campaña terrorista de treinta años, realizada por los terroristas comunistas de la Fracción del Ejército Rojo apoyados por la Unión Soviética, a menudo conocidos como la banda Baader-Meinhof.
Ya en 2014, los servicios de seguridad estaban alertando que el terrorismo de los islamistas, ya sea organizado o individual, se había vuelto la más grande amenaza en Alemania. De acuerdo con la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (Bundesamt für Verfassungsschutz o BfV), el servicio de inteligencia nacional de Alemania, había casi 26.000 islamistas en Alemania hasta abril de 2018, aunque como se mencionó anteriormente, el número evaluado que comprende la “Islamistische Gefährder” (amenaza islamista), que son los que se cree que están motivados y son capaces de ejecutar un ataque terrorista, es mucho menor, alrededor de 800, con alrededor de la mitad de ellos que ya están fuera del país y otros 150 en custodia. [4]
Entre los islamistas y salafistas en Alemania, la BfV cree que el contingente yihadista-salafista estaba compuesto por aproximadamente 10.800 individuos en 2017. [4]
Un importante grupo yihadista-salafista fue el de La Verdadera Religión (DWR), el cual fue prohibido en noviembre de 2016 luego de que las autoridades descubrieran que 140 de los partidarios del grupo se habían ido a pelear con ISIS en Siria e Irak. El fundador del grupo, un palestino llamado Ibrahim Abu Naji, ha sido en gran parte contenido, y sus operaciones reducidas de su alcance internacional – con sus actividades en Suiza y Austria en gran medida detenidas – a llevar a cabo ocasional “dawa callejero” en Alemania. La BfV cree que la actual amenaza de radicalización por parte de DWR ha sido echada de las mezquitas y las organizaciones salafistas nacionales, y ahora reside en su mayor parte en línea. [5]
Los alemanes también están teniendo problemas para lidiar con un contingente de alrededor de 500 extremistas del Cáucaso – Chechenia, Daguestán e Ingusetia. Estos hombres son aguerridos y fervientes después de su larga lucha con el gobierno ruso, y han estado involucrados en reclutamiento para ISIS en Siria e Irak. Pero cuando ellos establecen centros de entrenamiento físico, tales como para artes marciales, o empiezan a adquirir armamento, es muy poco lo que las autoridades pueden hacer al respecto ya que se trata de actividades protegidas para todos los ciudadanos. [6]
El hecho de que el número de adherentes a la ideología salafista se ha “elevado a un máximo histórico” ha suscitado preocupación en Alemania, ya que incluso si comienza de forma no violenta se teme que el salafismo pueda normalizar ideas y conceptos que lleven a un extremismo violento. [7] El problema para las autoridades alemanas es que a pesar de que la escena salafista crece, se está fragmentando y convirtiéndose cada vez más en un fenómeno personal en la red, lo cual lo vuelve algo muy difícil de rastrear para las autoridades. [8]
El Apoyo a los Yihadistas-Salafistas desde Alemania: La Amenaza En la Red
El Internet, particularmente la denominada Red Oscura, ha permitido el “financiamiento del yihad” para proliferar, con armas y manuales de entrenamiento vendidos abiertamente en este rincón sigiloso del ciberespacio, así como a militantes preparados el dirigir a los aspirantes a terroristas en su caos y violencia. Gracias a la Red Oscura, capacidades y tecnologías que individuos y células pequeñas habrían hallado imposibles de adquirir, están ahora al alcance de unos cuantos clics. Aun así, el recurso más importante que se mueve en la Red Oscura es el elemento fungible que hace posible a todos los demás: el dinero. [9]
Para Alemania, la amenaza de radicales locales siendo dirigidos desde el exterior se ha vuelto más aguda desde la masiva ola de migrantes de 2015, la cual ya ha resultado en 340 casos conocidos de terroristas que buscaban atacar el país por orden de organizaciones yihadistas que los guiaban desde fuera. Como lo subrayó un funcionario de seguridad alemán, “Estos sólo son los casos de los que nos hemos enterado y pueden haber más casos.” [10]
La preocupación de que los horribles ataques que sucedieron en París en noviembre de 2015 podrían repetirse no está infundada, dado que es probable que hubiera equipos terroristas entre los flujos migratorios – esta es, después de todo, la forma en que ingresó de manera clandestina a Europa la red que atacó París y pasó a atacar Bruselas en marzo de 2016. Además de ello están las hasta 40.000 personas que viajaron a Siria e Irak para unirse a ISIS y a otros grupos extremistas, alrededor de 800 de ellos alemanes, que ahora podrían buscar volver ya que el “califato” ha sido borrado del mapa. [11]
El Apoyo a los Yihadistas-Salafistas desde Alemania: La Amenaza Fuera de la Red
Peter Neumann, un experto en contraterrorismo del King’s College de Londres, ha pedido el cierre de mezquitas extremistas en Alemania tan pronto como sea posible, a causa de que están reclutando jóvenes y construyendo redes terroristas. [12]
“En el pasado, las mezquitas [extremistas] han demostrado ser ‘semilleros’ para la radicalización de perpetradores salafistas [terroristas]”, dijo Neumann. “Por un largo tiempo, las agencias de seguridad federal alemanas han seguido una estrategia de no interferencia contra las mezquitas islámicas de modo que puedan monitorear la escena salafista en sus ‘puntos de cristalización’, pero a la luz de la amenaza del extremismo, esto se considera inaceptable”. [13]
“El carisma de los predicadores violentos ha tenido éxito repetidamente para construir redes terroristas a partir de comunidades de mezquitas, así como para desarrollar formas para atraer a jóvenes musulmanes en el exterior”, continuó Neumann. “En ninguna otra parte existen tantos riesgos salafistas como en Alemania”, aunque con menos reclutas fluyendo hacia ISIS y hacia otros grupos yihadistas en comparación con Francia, Gran Bretaña y los Estados Unidos. [14]
Alrededor de la décima parte de las mezquitas de Alemania están siendo monitoreadas por la BfV debido a actividades extremistas documentadas o presuntas. En el estado de Renania del Norte-Westfalia, 109 mezquitas están bajo vigilancia de la inteligencia. De estas, se cree que 70 mezquitas son salafistas y 16 de ellas están bajo la influencia de extremistas de la Hermandad Musulmana. [15] Esta vigilancia del estado no pasa desapercibida, sin embargo, y por esa razón una gran cantidad de actividad extremista se lleva a cabo fuera de las mezquitas. [16]
Aun así, eliminar las influencias extremistas en las mezquitas restringiría considerablemente el problema de militancia islamista doméstica para Alemania. Las mezquitas han funcionado en ocasiones como sede de los esfuerzos de reclutamiento para ISIS bajo la cubierta de labor humanitaria. [17] Es por esta razón que dieciséis estados han señalado su apoyo, en principio al menos, para la idea de extender el “impuesto eclesiástico” de Alemania (Kirchensteuer), al islam, ya que la ley vigente solamente se aplica al cristianismo y al judaísmo. [18]
El ministerio del interior del estado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, por ejemplo, dijo que estaba abierto a “financiación de la mezquita en base al modelo de iglesia” para reducir la influencia extranjera, incluyendo “el peligro de posible radicalización”. [19] Y un portavoz del ministerio del interior del estado de Baden-Wurtemberg repitió esto, diciendo que “el contenido teológico y la opinión política” estaban siendo dirigidos en direcciones negativas, incluyendo en formas “islamistas radicales o antidemocráticas”, por medio de financiamiento externo. [20]
Aumentar los ingresos de la comunidad local de esta forma ayudaría a marginar a los extremistas: la razón principal por la que esta minoría marginal es capaz de tener un poder tan desproporcionado sobre la población musulmana es que tiene la mayoría del financiamiento, y montos significativos de ello provienen del exterior, específicamente desde Turquía. Cortar esto y hacer que las instituciones islámicas dependan de los diezmos de musulmanes alemanes las haría sensibles a las opiniones de esta comunidad en su mayoría moderada. Una ventaja adicional de seguridad es que reduciría la capacidad del gobierno turco en particular, el cual controla varias mezquitas alemanas a través de la Unión Turco-Islámica de Asuntos Religiosos (DITIB) para llevar a cabo espionaje. [21]
Esfuerzos del Gobierno Alemán para Confrontar a los Salafistas-Yihadistas Nacionales
El gobierno alemán estableció el Centro de Contraterrorismo Conjunto (Gemeinsames Terrorismusabwehrzentrum o GTAZ) en 2004 para coordinar entre 40 agencias de seguridad internas que estaban enfocadas en identificar y neutralizar la amenaza del terrorismo yihadista. El Centro de Internet Conjunto (Gemeinsames Internetzentrum o GIZ) juega un papel similar en el reino cibernético. [22] Este enfoque de poder “duro” no es todo lo que Alemania ha tratado de hacer.
El enfoque de poder “blando” de las autoridades alemanas ha incluido la creación de varios programas comunitarios en asociación con varias organizaciones no gubernamentales (ONGs) para tratar de prevenir que el radicalismo se arraigue. Se ha establecido un centro de asesoramiento sobre radicalización (Beratungsstelle Radikalisierung); está abierto para cualquier persona que esté preocupada por un conocido que parece estarse dejando llevar al extremismo, pero se enfoca en las poblaciones más vulnerables, como los refugiados. También existe una línea de ayuda para el mismo propósito que busca conectar a individuos en riesgo con imanes, maestros de escuela, la policía u otros que puedan ayudar a detener su descenso. El Centro de Información y Competencia contra Extremismo en Hesse (Hessisches Informations und Kompetenzzentrum gegen Extremismus o HKE) coordina estos esfuerzos preventivos y de intervención temprana. [24]
Conclusión
Queda claro que la propagación de la ideología salafista en Alemania ha tenido un impacto significativo en la población musulmana local. Los mecanismos de esta propagación son varios, desde el Internet a redes sociales en persona, libros y otras publicaciones traducidas, las cuales promueven las interpretaciones salafistas de conceptos islámicos, a menudo amplificadas por traducciones de fatwas (normas islámicas) de académicos saudís. La versión yihadista del salafismo se ha propagado en Alemania durante los últimos tres años y planteó un serio desafío para la influencia de instituciones islámicas oficiales.
A medida que el radicalismo se ha propagado dentro de la población musulmana alemana, ha provocado un contra-radicalismo del resto de la sociedad. Un estudio hecho por el Parlamento Federal encontró que los sentimientos anti-musulmanes han crecido en Alemania y que no estaban relacionados solamente a la crisis causada por la política de puertas abiertas de la canciller Merkel para un millón de refugiados, en su mayoría musulmanes. Una clara mayoría de los alemanes, 55,7 por ciento, ahora dicen que no quieren una mezquita en sus áreas y 70 por ciento pidieron prohibir el velo en escuelas e instituciones públicas. Cerca de un tercio de los encuestados no estaban contentos con la idea de tener musulmanes como vecinos. [25]
Reducir esta polarización tiene que empezar con el principal impulsor, concretamente el desafío islamista en Alemania.
Recomendaciones
Para ir hacia una armonía social, las autoridades alemanas deberían:
- combatir directamente la infraestructura yihadista-salafista en el país, penetrando sus redes para ganar información que pueda ser usada para dañar la causa extremista;
- incrementar la supervisión en cuanto al financiamiento de las mezquitas, controlando, si no es que eliminando, el financiamiento exterior; y
- expulsar a cualquier imán extranjero que predique odio y subversión contra el estado o que esté involucrado en actividades sospechosas.
Esta no es una lista completa, pero comenzaría a frenar el problema.
Referencias
[1] Germany’s Federal Criminal Police Office (Bundeskriminalamt, BKA) report, 2018.
[2] David Vielhaber, “The Milli Görüs of Germany”, 13 June 2012, Hudson Institute.
[3] Georg Heil, “The Berlin Attack and the ‘Abu Walaa’ Islamic State Recruitment Network”, February 2017, CTC Sentinel.
[4] Bundeskriminalamt, 2018.
[5] Verfassungsschutzbericht, the yearly report of the Federal Office for the Protection of the Constitution (Bundesamt für Verfassungsschutz, BfV), 2017.
[6] Ibid.
[6] “Number of Salafists in Germany reaches record high”, 10 December 2017, Deutsche Welle (DW).
[7] Ibid.
[8] Ibid.
[9] Verfassungsschutzbericht, 2017.
[10] Ibid.
[11] Richard Barrett, “Beyond the Caliphate: Foreign Fighters and the Threat of Returnees”, October 2017, Soufan Group.
[12] German “dom radio”, 23 April 2018.
[13] Ibid.
[14] Ibid.
[15] “More Than 100 Mosques Under surveillance in a German State”, 3 July 2009, News One.
[16] Verfassungsschutzbericht, 2017.
[17] Justin Huggler, “Police raid Berlin mosque as ‘Isil’ jihadists try to recruit refugees”, 22 September 2015, The Telegraph.
[18] “Germany mulls ‘mosque tax’ to cut out foreign funding”, 12 May 2019, The Local.
[19] Ibid.
[20] Ibid.
[21] Ibid.
[22] “Germany: Extremism & Counter-Extremism”, 2019, Counter-Extremism Project.
[23] Ibid.
[24] Ibid.
[25] “Germans tolerant of LGBT neighbors, but not Muslim ones”, 16 August 2018, Deutsche Welle.